Tabasco no es la excepción en materia de inseguridad
Los tabasqueños merecemos algo más que buenos deseos por parte de los gobiernos electos que no han podido mostrar un avance SIGNIFICATIVO
Tal como sucede en la mayoría de las entidades federativas del país, Tabasco sigue envuelto en problemas por la falta de seguridad para la población en general y también para los internos del Centro de Readaptación Social del Estado (Creset).
Y es que la semana previa un grupo armado se presentó a un bar y disparó contra varias personas dejando varios muertos y heridos. De la misma manera, la violencia se manifestó el lunes próximo pasado dejando un saldo de dos reos muertos y cinco más heridos.
A pesar de que los índices reportados por las autoridades de Seguridad Pública en Tabasco muestran una disminución de los delitos, para la gente las cosas no han cambiado, la percepción sigue siento de una falta de seguridad tanto en las calles como en los comercios. Ya no se diga de salir a divertirse por las noches.
Ni la política de rogarles a los delincuentes que piensen en sus madrecitas y ya no cometan más ilegalidades, ni la de hacerle ¡fuchi, huácala! a la corrupción o a los malandros parece servir de mucho.
Es muy difícil que quien ha tenido el poder lo deje así nada más por buena voluntad, más aún cuando tienen armas de alto poder para seguir haciendo y deshaciendo a su antojo.
Así que más valdría revisar la estrategia tanto del gobierno federal como estatal para poder controlar la “fiebre del oro” que ha convertido a muchos mexicanos en el peor azote de los propios mexicanos.
Los tabasqueños merecemos algo más que buenos deseos por parte de los gobiernos electos y que tras varios meses de haber iniciado no han podido mostrar un avance SIGNIFICATIVO en la lucha contra la violencia de los cárteles y de la delincuencia común.