Tabasco, el edén que todavía no se ha recuperado
Todavía estamos en septiembre, pero en términos macro, se puede dar por cerrado este ciclo y prepararnos para lo que vendrá en 2020
A pesar de las altas expectativas en los nuevos gobiernos federal, estatal y municipal, los meses siguen pasando sin que los habitantes de Tabasco puedan recibir y percibir los efectos del cambio pregonado diariamente.
El presidente ha hecho todo lo posible para darle un empuje a la entidad con el traslado de la Secretaría de Energía a Villahermosa o la construcción de la Refinería en Dos Bocas, municipio de Paraíso.
El gobierno estatal no se ha quedado atrás al impulsar los cambios legislativos que favorecen la inversión e incluso, se llegó a aprobar la llamada “Ley garrote” con el objetivo de impedir los cierres carreteros calles por parte de manifestantes que estén en contra de la construcción de la refinería o cualquier otra obra de interés público.
La razón explícita tanto del Poder Ejecutivo como del legislativo y ampliamente difundida en los medios locales fue la de evitar la extorsión a los empresarios por parte de seudolíderes sociales y sindicales que durante muchos años se dedicaron a “ordeñar” tanto a Pemex como a la iniciativa privada, entre otros.
También el municipio paraiseño ha puesto lo suyo para que todo marche sobre ruedas.
El punto es que, a pesar de todo, ni la economía ni las familias tabasqueñas, sobre todo el sector más desprotegido, que no ve la luz todavía en el largo túnel de la crisis tabasqueña que nada más no puede recuperarse de los excesos priistas y perredista más recientes.
Por si fuera poco, y aunque las autoridades aseguran que los índices delincuenciales han declinado, para la población en general la inseguridad es un tema pendiente que los mantiene con la preocupación de no saber si podrán regresar a sus hogares, cada día que salen a trabajar o a estudiar.
A nivel nacional, este año ha sido declarado perdido por la iniciativa privada con una casi recesión nunca admitida y que en Tabasco es una realidad cotidiana desde hacer varios años.
Queridos amigos tabasqueños, ojalá que el próximo año todo sea mejor. Y todavía estamos en septiembre, pero en términos macro, se puede dar por cerrado este ciclo y prepararnos para lo que viene.
Saludos en este Edén perdido y (todavía) no recuperado.
