Tabasco: Las regulares y las malas…
Ya en pleno despegue del 2018, empezaron a confirmarse las regulares y las malas noticias para Tabasco en el Presupuesto Federal, aprobado en la Cámara de Diputados durante las últimas semanas del año pasado.
El 2018 no será «miel sobre hojuelas».
No lo será por el tema petrolero. Tampoco por el apretado gasto federal para Tabasco. Y por si faltara más fuerza a la tormenta, por la forma como se limitaron los recursos en Programas y Proyectos de Inversión Federal para el estado en el paquete de este año. Evidentemente, no hay una idea clara de la urgente ayuda que necesita Tabasco.
Una decisión inexplicable: Se apostaba que estos recursos serían aprobados, pero al final siempre no. Se trata de la inversión para la Construcción de la Unidad Multidisciplinaria del Sistema de Centros Públicos de Investigación CONACYT en la Región Sur para atender Agroindustria, Logística y Distribución y Energía Sustentable. Ni un peso.
Era un tema importante, pero quedó en cero.
Otra acción que no tiene nombre: La nula asignación de recursos para el Proyecto Hidrológico para Proteger a la Población de Inundaciones en Tabasco (PROHTAB). Se esperaban 1,834 millones para obras hidráulicas. Nada en el 2018.
Y así hay varios conceptos.
De lo rescatable: Los $154 millones para el Distribuidor Guayabal y los $320 millones para la ampliación del tramo carretero Coatzacoalcos-Villahermosa, entre otros. Y hay inversión en el sector petrolero y energético. Lo comentaremos.
En la Cúpula del turismo
Asur confirmó que el aeropuerto de Villahermosa movilizó un millón 260 mil personas en el 2017, lo que marca un crecimiento en el arribo de pasajeros. Una buena noticia, que hoy será detallada. Ello indica que la ruta de la diversificación está funcionando en materia de turismo. Ya hay mayor actividad aeroportuaria y es una buena señal.
