Polémica por vacuna oral ‘fast track’ contra Covid-19
La OMS augura que una vacuna podría demorar en ver la luz por lo menos 18 meses porque se trata de un patógeno nuevo
Beijing. La noticia en China de una vacuna oral desarrollada en poco tiempo contra el coronavirus Covid-19 desató una polémica tan fuerte que el equipo y la institución implicadas anunciaron la corrección de problemas y ensayos clínicos.
Más temprano la universidad de Tianjin informó del logro científico y que el profesor Huang Jihua, líder del grupo a cargo, tomó cuatro dosis del producto sin presentar efectos secundarios.
Según el centro, la vacuna utiliza el Saccharomyces Cerevisiae (hongo de la levadura de cerveza) para producir anticuerpos que ayudan a combatir el virus.
Sin embargo, varias voces y la opinión pública dudan de su efectividad porque hay poca información disponible al respecto y se obtuvo muy rápido, cuando todo el proceso para lograr una inyección bien segura requiere de varios meses y hasta algunos años.
En respuesta a la controversia, la universidad indicó que corregirá problemas de formulación en el desarrollo de la sustancia y el mismo Huang admitió que todavía no se sometió a pruebas clínicas en animales y humanos, aunque demostró resultados exitosos.
Explicó que la procesó en poco tiempo gracias a una plataforma basada en el Saccharomyces Cerevisiae que su equipo creó hace años y el próximo paso será buscar una empresa calificada para trabajar juntos en la evaluación, verificación de los ensayos y el posterior uso.
Científicos dentro y fuera de China trabajan en varios proyectos en busca de una inyección contra el coronavirus Covid-19, pero la Organización Mundial de la Salud augura que demorará en ver la luz por lo menos 18 meses porque se trata de un patógeno nuevo.
No obstante, la nación asiática informó recientemente que espera probar en abril próximo al primer candidato y, si resulta efectivo, planea aprobar mediante canales expeditos posteriores procedimientos y empleo.
Sus investigadores examinan en animales distintas vacunas, incluido una recombinante, una con la tecnología mRNA y otra de construcción de ADN.
Mientras tanto, los hospitales incluyen en las terapias medicina tradicional china, el plasma sanguíneo, el remdesivir, creado para combatir el ébola; el fosfato de cloroquina, para proteger de la malaria; y los antivirales arbidol y favipiravir.
Pero la Comisión Nacional de la Salud recomendó no administrarlos por más de 10 días.
(Con información de Prensa Latina)