Pican alacranes a más de 300 mil mexicanos al año
Niños menores de cinco años y adultos mayores de 65, los más afectados, aunque hipertensos y diabéticos pueden ver agravadas su situación
“El alacrán cran cran, ay… te va a picar”, como dice la canción de Lucrecia; pero no lo hace por maldad. Quizá solo quiere adornarte la piel “con su hermoso cuerpo de oro”, narra José Revueltas en su cuento El sino del escorpión.
El al´áqrab (del árabe) o scorpio (del latín) pica con su aguijón e inyecta su veneno en un acto de defensa, pero sobre todo para cazar, apuntó el biólogo Gerardo Contreras Félix, colaborador de la Colección Nacional de Arácnidos del Instituto de Biología.
México tiene la mayor biodiversidad (cuenta con 289 de las mil 500 especies registradas). Mas también es el número uno en picaduras en el mundo. Por lo menos, 12 de esas 289 son un doloroso peligro para el país.
Todas aquéllas que afectan la salud, son del género Centruroides, aunque no todos los Centruroides son de importancia médica, aclaró Contreras Félix, doctor en Ciencias Biológicas por la UNAM.
Sobre todas las especies, tanto Centruroides como de otros géneros, pesa una fatalidad: son temidos y, por eso, aplastados al ser vistos en esa pared blanca que –indicó Revueltas– “tan enfermizamente les fascina”. La misma suerte si son avistadas corren las dos especies que habitan en casas de Ciudad de México (CdMx), que no son de notoria significación médica por la leve sintomatología de su veneno.
Qué se siente
Ay, si te pica algún escorpión (son los principales depredadores de insectos en la naturaleza y los mejores controladores de plagas, como la de cucarachas), dependiendo de la cantidad de veneno inyectada (es menor si acaban de cazar y comer) vas a sentir dolor, se enrojecerá la zona donde clavó su aguijón y sudarás.
Síntomas más graves son calambres (a los 30 minutos de la picadura) y el adormecimiento de músculos involucrados en la respiración, que podría ser fatal en personas alérgicas al veneno de abejas, con bajas defensas inmunológicas, o si no se les aplica oportunamente un antiveneno.
En pueblos alejados los faboterápicos (denominación que reciben los antivenenos de última generación) “de vez en cuando son difíciles de conseguir”, pese a que hay un programa nacional contra el alacranismo del sector salud. Los hospitales en zonas endémicas cuentan con antivenenos disponibles.
Antiveneno mejorado
Aunque hay letalidad por picadura de alacrán, “la probabilidad de muerte es baja”, consideró Contreras Félix. En México unas 300 mil personas son picadas al año por escorpiones, según un registro de 2016. Pueden ser más o menos, porque muchos casos no se reportan o se confunden con mordida de araña.
En 2018, por ejemplo, los casos reportados fueron 275 mil 357 y los estados con mayor morbilidad fueron Jalisco, Guerrero y Guanajuato, apuntó Walter García Ubbelohde, doctor internista por la Facultad de Medicina.
Los más afectados son niños menores de cinco años y adultos mayores de 65. En hipertensos y diabéticos, pueden agravar sus patologías, agregó el especialista en intoxicaciones por animales ponzoñosos.
Tampoco hay cifras exactas de muerte por alacranismo, pues es complicado hacer su registro, según Contreras Félix, quien ha descrito nuevas especies del género Vaejovis de Michoacán, así como de Centruroides de Oaxaca.
En los años 1970-1980 hubo entre 700 y 800 muertes. Gracias al Alacramyn, antiveneno mejorado en colaboración con Alejandro Alagón, investigador del Instituto de Biotecnología, se han reducido los casos de mortalidad, aseguró en 2018 Lourival Possai, investigador de la misma universidad, en una conferencia sobre los componentes de los venenos de alacrán.
Güeritos de peligro
Las especies que habitan en casas de la CdMx son del género Vaejovis. V. mexicanus es la más grande, con cinco centímetros de largo, y la más chiquita V. granulatus. Ambas con cuerpos robustos y coloraciones que tienden hacia el negro.
Gustan de paredes de rocas, lugares sombreados y ligeramente húmedos. Cazadores nocturnos, sus avistamientos son en temporada de lluvia, que coincide con la época de apareamiento.
Su veneno, aseguró Contreras Félix, no tiene efectos graves en la salud. En cambio, el de muchos –pero no todos– de los llamados alacranes güeritos y delgaditos, sí pueden ser letales y por eso son de relevancia médica.
A simple vista es complicado saber cuál es peligroso. A diferencia de los robustos y de color negruzco de Ciudad de México, los peligrosos tienen pinzas, patas y cola muy gráciles y alargadas, así como coloraciones amarillas y a veces una banda en la espalda. Los más dañinos, que son Centruroides, cuentan con un aguijón más alargado que el de otros géneros.
(Con información de Gaceta UNAM)