La obesidad aumenta el riesgo de padecer varices

Prueban fármacos comerciales que podrían ayudar a prevenir y a controlar la insuficiencia venosa crónica de los lechos venosos profundos

Las varices, más que un problema estético, es un mal circulatorio que puede evolucionar a la letal trombosis venosa profunda. Cuando se padecen durante más de seis meses se llama insuficiencia venosa crónica (IVC), que es el estancamiento de la sangre en los lechos venosos profundos, principalmente de las piernas.

Luego se vuelve severa y las válvulas del sistema venoso son insuficientes para la circulación y el retorno eficaz de la sangre al corazón.

Al fallar las válvulas pueden formarse coágulos o trombos que al migrar podrían causar infartos o accidentes vasculares cerebrales, advirtió Omar Francisco Carrasco, de la Facultad de Medicina.

Son factores de riesgo: sexo femenino, embarazos (más de tres), oficios (panaderos) y actividades (profesores, vendedoras, cajeras) que obligan a estar de pie o sentado mucho tiempo, así como obesidad.

En México –sostuvo– podría convertirse en un problema de salud pública, ya que 71.3 por ciento de los adultos tiene obesidad, con una prevalencia ligeramente elevada en las mujeres.

Sus síntomas clínicos, precisó, son venas varicosas, dolor, hiperpigmentación, edema y en casos severos, úlceras en miembros afectados. Los pacientes reportan pesadez, enrojecimiento, ardor y comezón.

En algún momento de la vida, 60 por ciento de la población padecerá varices. De ese porcentaje, 30 por ciento desarrollará insuficiencia venosa crónica severa y tendrá riesgo de trombosis.

Mejoran función endotelial

Una teoría postula que un gen favorece la IVC y que padres con varices, lo heredan a algunos de sus descendientes. Sin embargo, evidencias científicas recientes indican que la disfunción endotelial venosa es el primero de varios sucesos patológicos que desencadenan la sintomatología y las complicaciones de la IVC.

Carrasco afirmó que se puede “prevenir, revertir y tal vez evitar” la IVC. Con ese propósito estudia la fisiopatogenia de esta afección y experimenta con fármacos para mejorar la función del endotelio, capa que separa el vaso sanguíneo de la sangre.

Para tratar la IVC, angiólogos y cirujanos cardiovasculares, por medio de cirugía, quitan o extraen todo el segmento venoso con insuficiencia crónica. Cuando es inoperable, se ponen filtros en las venas más grandes, para que no pasen los trombos y se extraen de manera mecánica.

En cambio, el objetivo de Carrasco es mejorar con fármacos la función endotelial para que las varices o la insuficiencia venosa crónica no progrese a trombosis venosa profunda.

Para evitar que sufran y mueran por hipoxia las células endoteliales, experimenta con medicamentos contra la hipertensión como captopril y enalapril, así como contra el colesterol alto, como la pravastatina y atorvastatina.

Carrasco probó esos y otros fármacos en tejido de segmentos de venas de pacientes programados para cirugía, proporcionados por el Hospital General Doctor Manuel Gea González.

Aunque se esperaba que todos funcionaran, los resultados indican que los más efectivos para mejorar la función del endotelio son las estatinas (atorvastatina, por ejemplo) y el castaño de Indias, que agregan a cremas comerciales como la Goicoechea.

Aún faltan estudios clínicos para determinar dosis, intervalos de aplicación y tiempo de administración de los medicamentos para mejorar la función endotelial.

ACCIONES EN CONTRA

Para evitarlas o controlar la insuficiencia venosa crónica es necesario hacer ejercicios para la circulación. Por ejemplo, al estar mucho tiempo sentado, elevar los talones repetidamente. Así los músculos que rodean al sistema venoso profundo, se contraen y empujan la sangre para que mantengan su torrente natural.

Quienes están de pie largo tiempo, como personal médico en una cirugía, deben usar medias de compresión leve, mediana o grande, según el grado de insuficiencia venosa.

A quien padece obesidad o está embarazada les ayuda mantener un peso ideal, con una buena alimentación y la constante actividad física.

(Con información de Gaceta UNAM)

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