‘Epidemia’ de violencia obstétrica en el centro del país
Ciudad de México. Cuatro de cada diez mujeres han sido víctimas de violencia obstétrica en la red hospitalaria, ubicándose la Ciudad de México en el segundo sitio a nivel nacional, informó la CDHDF, que urgió a las autoridades capitalinas a erradicar estas práctica negligente.
La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal puntualizó que de presentarse este maltrato en instituciones de salud a cargo del Estado, se convierte en una modalidad de violencia institucional, la cual debe ser atendida y eliminada.
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares 2016 -realizada por el – Inegi- de 441 mil 632 mujeres de 15 a 49 años entrevistadas al acudir a un hospital por motivo de su embarazo, un total de 173 mil 077 presentaron algún incidente, es decir 39.2 por ciento, solo por debajo de las mexiquenses con 39.5.
En el marco de la conmemoración del Día Internacional de las Mujeres, la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal llamó a las autoridades capitalinas a garantizar el derecho a la salud materna y generar un ambiente de atención médica que proporcione seguridad, respeto y calidez a las mujeres que cursan una etapa de embarazo, parto o puerperio, ante los casos registrados de violencia obstétrica.
La CDHDF ha identificado hechos constitutivos de violencia obstétrica desde hace varios años y se han visibilizado a través de las Recomendaciones 10/2006, 13/2006, 2/2009, 7/2011, 15/2012, 3/2015 y 7/2017, precisó.
Preocupa a esta Comisión el maltrato que padecen las mujeres dentro de las instituciones de salud públicas, ya que quienes acuden a requerir los servicios de salud de la red de salud capitalina en su mayoría son personas de bajos recursos, que no tiene más opciones para tratarse, quedando condicionadas a recibir la atención que en esos lugares les den, aún con todo lo inoportuna y deficiente que ésta pueda resultar.
La CDHDF reconoce que la Secretaría de Salud paulatinamente ha realizado acciones para erradicar las prácticas médicas negligentes que atentan contra la salud materno-infantil, pero le solicitó un mayor esfuerzo e incrementar los recursos e insumos para que la atención hospitalaria que se ofrece a las mujeres en etapa gestacional, parto o puerperio, sea suficiente, oportuna y de calidad para la resolución de cualquier evento obstétrico.
(Con información de La Jornada)