Alertan utilización de metanol en gel antibacterial
Destruye la mielina, sustancia protectora de las terminales nerviosas del cuerpo, advierte el químico Carlos Rius Alonso
En México hay un mercado informal que adultera el alcohol del gel antibacterial y lo sustituye con metanol para tener ganancias más altas; aunque es más económico en su producción, es altamente tóxico para el cuerpo humano y, a la larga, puede causar graves problemas en la salud, advirtió el académico de la Facultad de Química, Carlos Rius Alonso.
Dijo que Estados Unidos emitió ya una alerta de importación para este material originado en México, además de que un estudio publicado en marzo del año pasado analizó una serie de geles elaborados en el país, el cual demostró que algunos estaban diluidos con agua y otros usaban metanol.
El metanol se debe separar, pues es tóxico para el cuerpo humano debido a la forma como se metaboliza: el hígado para eliminarlo lo convierte por una oxidación, primero en formaldehído y posteriormente es oxidado a ácido fórmico, éste ocasiona una fuerte inflamación, aparte de destruir la mielina, sustancia protectora de las terminales nerviosas del cuerpo, produciendo cortos en el sistema nervioso, explicó.
El primer efecto tras consumirlo es una visión nublosa, pues los nervios ópticos son los primeros en ser afectados, además de náuseas y vómito, por la irritación del tracto gastrointestinal. Si una persona se envenena por esta sustancia, se debe actuar rápido y suministrar antídotos para evitar una consecuencia fatal.
Utilizar metanol en gel antibacterial también es dañino, pues a pesar de no ser consumido directamente es absorbido por la piel, y en constante uso se puede acumular y causar problemas.
El experto del Departamento de Química Orgánica reafirmó que lavarse las manos con agua y jabón ha sido fundamental durante la pandemia, debido a que se emulsifica por completo la capa envolvente del virus, la cual es una cubierta de fosfolípidos semejantes a una grasa. Sin embargo, no siempre se cuenta con agua, por ello, los geles antibacteriales se han vuelto aliados en contra del coronavirus.
Estos geles funcionan debido a que su ingrediente principal, el etanol, mínimo 70 por ciento de concentración, disuelve las grasas. Empero, esto es una desventaja, ya que reseca la piel, y para que ello no suceda se utiliza glicerina. Al evaporarse el etanol, la glicerina humecta las manos.
Asimismo, el etanol es una sustancia inflamable y se corre el riesgo de accidentes; para evitarlo se agrega carboximetilcelulosa, un agente espesante, además de trietanolamina para que emulsifique bien. Estos son aditamentos empleados para manejar de forma más segura las soluciones de etanol.
No obstante, usar estos geles en exceso puede resultar contraproducente, pues después de ponerlos muchas veces sobre las manos, el agente espesante se acumula y se convierte en una especie de atrayente del virus; por tanto, lo recomendable es utilizarlos lo menos posible y mejor lavarse las manos con agua y jabón.
Además, debido al aumento en el uso de este producto, se han dado casos de adulteraciones en su fabricación. Una de ellas es poner menor cantidad de alcohol y rebajarlo con agua, pues no se puede notar la diferencia. La otra es usar un tipo de alcohol más económico como el metanol; sin embargo, éste no logra emulsificar eficientemente la capa de fosfolípidos del virus.
El etanol se obtiene principalmente por fermentación del almidón de maíz en Estados Unidos, pero en México de plantas como agaves o frutas, pues cualquier planta que contenga azúcar se puede fermentar y destilar para obtener alcohol. Cuando se fermentan estas plantas, adicionalmente al etanol formado, hay presencia de pectinas, las cuales se hidrolizan y producen metanol, concluyó.
(Con información de Gaceta UNAM)