Sin salud y educación, nula estabilidad social
“La salud y la educación son elementos de estabilidad social, detonantes del crecimiento económico y productividad. La salud no es todo, pero sin ésta no hay casi nada”, dijo José Narro Robles, exrector de la UNAM y secretario de Salud federal.
El mundo está enojado: hay malestar e inconformidad porque hay más formas de percatarse de las brechas y contrastes que tiene el ser humano. “Se han debilitado algunos valores fundamentales; no hemos conseguido disminuir la pobreza, que junto con la ignorancia son las peores compañeras de la salud”.
Al intervenir en el Primer Congreso Interdisciplinario del Área de la Salud de la Facultad de Medicina, expuso que ésta en México es un derecho humano, decretado constitucionalmente desde 1983, y, junto con la educación, son los mejores igualadores sociales.
La prevención es el camino
Al dictar la conferencia magistral La Prevención en Salud, un Problema Interdisciplinario, ante decenas de alumnos, académicos y autoridades universitarias, Narro indicó que en México hay aproximadamente 13 millones de personas mayores de 60 de años, para 2030 habrá 20.4 millones, y en 2050 se estima que serán 32.4 millones de mexicanos en ese rango, “por lo que a mayor edad, más enfermedades, y hay que prevenir”.
Citó varios asuntos y temas para atender en esta materia: la transición demográfica y epidemiológica; el sobrepeso y la obesidad; la diabetes e insuficiencia renal; el embarazo en niñas y adolescentes; las enfermedades del corazón; la salud mental y las adicciones; los tumores malignos y la atención geriátrica.
Puso especial atención en sobrepeso, obesidad y diabetes, pues en el mundo este último padecimiento alcanzó, hasta el año 2014, los 422 millones de pacientes. En México, precisó, la mortalidad por esa enfermedad fue en 1980 de 14 mil, y en 2016 de 105 mil.
En el Auditorio Raoul Fournier remarcó que “la prevención es el camino. Tenemos que entrarle todos. No se verá de manera inmediata el resultado, y requiere constancia, hay que invertir más, porque prevenir se relaciona con el desarrollo del país y tiene un gran impacto social: mejor calidad de vida y rendimiento escolar, porque cuando hay salud, todo se facilita”.
Por ello, se debe transitar de la multi a la interdisciplina, pues la salud tiene que ver con todos los ámbitos del conocimiento: la ingeniería, arquitectura y ciencias sociales, entre otros.
Dijo sentirse preocupado por el fenómeno del embarazo en niñas y adolescentes, pues en 2016, nueve mil 555 niñas de entre 10 y 14 años de edad se convirtieron en madres. Para el sector de entre 15 y 19 años, la cifra fue de 390 mil.
Estuvieron también Germán Fajardo Dolci, director de la Facultad; María Dolores Zarza Arizmendi, titular de la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia, y José Halabe Cherem, jefe de la División de Estudios de Posgrado de Medicina, académicos y alumnos de la entidad universitaria.
(Con información de Gaceta UNAM)
