Humanos, una sola especie: no hay superiores ni inferiores
Aunque el darwinismo social ha sido utilizado como fundamento para impulsar el racismo, el nazismo y la eugenesia –que buscan mejorar las cualidades de una raza–, Charles Darwin fue el primer biólogo en reconocer que todos los seres humanos pertenecemos a una misma especie y no hay grupos superiores o inferiores, afirmó Rosaura Ruiz Gutiérrez, coordinadora de Proyectos Académicos Especiales de la UNAM.
Lo que hay son grandes diferencias culturales y tecnológicas entre las sociedades, pero los individuos no somos distintos biológicamente, añadió la exdirectora de la Facultad de Ciencias, al impartir la conferencia Evolución: su Significado y su Impacto.
“De hecho, no puede hablarse de razas humanas, es un error. Los negros y los blancos nos distinguimos por el color de la piel, la forma del pelo, pero no por ser superiores o inferiores. Eso es fundamental en Darwin”, aseveró la bióloga ante estudiantes reunidos en el Auditorio Alfonso Caso.
Expuso que históricamente el hombre ha buscado dar respuesta a preguntas acerca de por qué hay diversidad y por qué los organismos se adaptan. Primero fueron las religiones y la filosofía quienes trataron de explicarlo y posteriormente, la ciencia.
Recolección
Darwin, prosiguió, realizó estudios de clérigo en la Universidad de Cambridge, donde aprendió teología natural y trató de comprender la creación de las plantas, los animales y los minerales. Al concluir, viajó durante cinco años en el barco Beagle, en el que recorrió África, América y Australia, donde recolectó fósiles, plantas, animales y hongos que posteriormente envió a Inglaterra para que fueran catalogados.
Al final de la expedición comenzó a dudar de la teología natural, de la idea de la creación, así como de la existencia de un número permanente de especies o que la adaptación es perfecta.
Charles Darwin inició el estudio de la biogeografía que lo llevó a creer que no hubo una creación y que cada especie surge en un lugar y de allí se dispersa.
“Se refería a los habitantes de la Tierra del Fuego como fueguinos, grupos que definió como salvajes, primitivos, atrasados, pero al mismo tiempo reconoció perfectamente que eran seres humanos de la misma especie que los ingleses”, agregó.
Además, observó que hay variaciones en las especies, que la adaptación es un proceso y variación más selección natural es igual a la adaptación. A partir de Darwin, todos los organismos estamos ligados y todo lo humano es explicable en términos científicos.
La también expresidenta de la Academia Mexicana de Ciencias indicó que los humanos no somos los dueños del universo como lo plantean algunas religiones, y si no cuidamos a las otras especies tampoco podremos sobrevivir.
Igualmente, rechazó los planteamientos del racismo, nazismo y eugenesia, que a partir de hablar de la superioridad de determinados grupos humanos han tratado de exterminar a otros o limitar la reproducción entre aquellos que consideran inferiores.
Al término de la conferencia, que formó parte de las actividades del Programa Universitario de Bioética, su coordinadora, Paulina Rivero Weber, entregó un reconocimiento a Ruiz Gutiérrez.
BEAGLE
El viaje del Beagle es el título más común del diario de viaje que Charles Darwin publicó en 1839, titulado originalmente Diario y Observaciones.
El nombre con que fue publicado hace referencia a la segunda expedición del HMS Beagle, que zarpó de Plymouth el 27 de diciembre de 1831 al mando del capitán Robert FitzRoy.
El libro, que también ha sido conocido como Diario de Investigaciones, reúne las emocionantes memorias de Darwin, así como sus anotaciones de índole científica relativas a la biología, geología y antropología, las cuales sugieren las ideas que más tarde le llevarían a escribir su teoría de la evolución por selección natural.
(Con información de Gaceta UNAM)