El deterioro de acuíferos vulnera derechos humanos
La UNAM y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) presentaron los resultados del “Estudio sobre protección de ríos, lagos y acuíferos desde la perspectiva de los derechos humanos”, a cargo de especialistas de esta institución, cuyo objetivo general fue evaluar las implicaciones de la contaminación y sobreexplotación de las aguas continentales superficiales y subterráneas, respecto al goce y disfrute de los derechos humanos.
El documento contiene mapas, gráficas y tablas que reflejan la situación de los diversos problemas que condicionan la protección de los derechos humanos en torno a la disponibilidad, contaminación y sobreexplotación del recurso hídrico en México.
El derecho a este recurso requiere el diseño de estrategias que faciliten un acceso mayor y sostenible al mismo.
Incluye un análisis sobre la gestión del agua, como proceso de coordinación interinstitucional, participación y corresponsabilidad de actores gubernamentales y de la sociedad civil para lograr el desarrollo sustentable del recurso hídrico en beneficio de todas las personas. También propone soluciones orientadas al diseño de políticas públicas en materia de agua, destacando su importancia bajo el principio de interdependencia de los derechos.
En el acto, Leonardo Lomelí, secretario general de la UNAM, destacó que esta situación es, sin duda, uno de los grandes problemas nacionales; es transversal, afecta economía, sociedad, convivencia social, bienestar individual y calidad y conservación del ambiente.
El derecho humano a un medio ambiente sano, reconocido por la Constitución, se ve vulnerado cuando la gestión de ese recurso no es la adecuada, cuando la contaminación degrada la calidad de las corrientes de agua superficiales y pone en riesgo los mantos acuíferos. Además, consideró, su distribución en el territorio ahonda los desequilibrios y se convierte en un factor adicional de desigualdad y exclusión social.
Así, esta investigación que es pertinente y tiene que darse a conocer, debe servir para orientar una política pública referente al tema. “Felicito a la CNDH y a la Coordinación de Humanidades por este esfuerzo y espero que logremos hacerlo un asunto prioritario en la agenda nacional”, concluyó Lomelí.
Luis Raúl González Pérez, presidente de la CNDH, opinó que se describe la complejidad de la escasez hídrica y sobreexplotación de acuíferos que enfrentan algunas entidades federativas del norte del país. “Estas problemáticas se agravan por el uso de la fracturación hidráulica o fracking”.
En el Auditorio Jorge Carpizo de la Coordinación de Humanidades, el ombudsman argumentó que ante los escenarios que describe el estudio, el derecho al agua y al saneamiento en relación con la protección de los ríos, lagos y acuíferos, requiere el diseño de estrategias que faciliten un acceso mayor y sostenible a este recurso, en particular para gente y comunidades de las zonas rurales y urbanas más desfavorecidas.
Por último, precisó que el texto –que se enviará al Congreso federal– será útil para el desarrollo e intercambio de las mejores prácticas que redundarán en una protección más amplia de los derechos y la dignidad de las personas.
Unión de esfuerzos
Alberto Vital Díaz, coordinador de Humanidades, dijo que este análisis es un modelo de trabajo interdisciplinario e interinstitucional. “Que la CNDH y la UNAM mediante esa entidad universitaria unan esfuerzos para hacer una labor de cooperación para un análisis específico sobre aspectos de gran relevancia, es digno de celebrarse”.
Aquí se conjunta la perspectiva de derechos humanos con aspectos específicos de la realidad contemporánea, la noción de protección y específicamente de ríos, lagos y acuíferos, es uno de los temas que debe atenderse cada vez más con muchísima fuerza.
Finalmente, Jorge Ulises Carmona Tinoco, sexto visitador general de la CNDH, resaltó que la investigación coordinada por la investigadora Adriana Sandoval Moreno, de la Unidad Académica de Estudios Regionales de la UNAM, presenta un esquema completo, “técnico pero comprensible sobre la situación general que guardan ríos, lagos y acuíferos en México y que nos permite ahondar sobre su urgente atención”.
(Con información de Gaceta UNAM)
