Comanda puma nueva misión análoga a Marte
Es la primera tripulación latinoamericana que pruebe auténticos trajes espaciales en la octava misión de la Universidad de Dakota del Norte
“Parecerán cuatro malvaviscos gigantes en la pradera de Grand Forks”, anticipó así la Universidad de Dakota del Norte el momento en que los cuatro integrantes de la primera tripulación latinoamericana prueben auténticos trajes espaciales en la octava misión de dicha institución estadunidense, en la que Danton Iván Bazaldua Morquecho, alumno de la Facultad de Ingeniería, será el comandante.
El estudiante de Ingeniería en Telecomunicaciones, de 25 años de edad, fue designado titular de dicha empresa espacial “por su experiencia en otras misiones de carácter análogo y de simulación”.
En esta ocasión estará del 2 al 16 de octubre próximos en las instalaciones de la Universidad de Dakota del Norte, en Estados Unidos, en un proyecto financiado por la NASA por medio del denominado Established Program to Stimulate Competitive Research, conocido como NASA Epscor, con el objetivo de probar y desarrollar tecnología espacial.
“Mi función en esta misión, en la que funjo como comandante, es examinar y experimentar con desarrollos propios de la Universidad de Dakota del Norte y de la NASA. Seremos cuatro tripulantes; mis compañeros provienen de Colombia, Perú y Argentina. En esta que es una tarea completamente científica, con horarios muy rigurosos, todos contamos con experiencias análogas”, explicó.
De Latinoamérica
Bazaldua Morquecho destacó que será la primera ocasión en la historia de dicha entidad educativa en que participarán integrantes provenientes de universidades e instituciones latinoamericanas. Todo esto, añadió, se logró por el interés de Pablo Gabriel de León, ingeniero aeroespacial argentino que labora con la NASA, abocado a los trajes especiales, con los que se estará trabajando.
“Si bien es cierto que las principales agencias espaciales están muy interesadas en estos temas, Latinoamérica ya ha empezado a involucrarse a fondo en ello y ha iniciado a dar relevancia a la idea de usar el espacio no sólo con fines académicos, sino también con objetivos estratégicos, incluso hasta militares.”
La parte esencial de esta labor, añadió, no es solamente el deseo de ir a Marte o dar la vuelta en un cohete, conlleva ventajas estratégicas. Ahí están, ejemplificó, las grandes naciones que poseen recursos en el espacio porque les genera no sólo presencia económica y política, sino además información de cómo están sus fronteras y hasta de su biodiversidad.
“Hoy todo es a base de tecnología espacial. Vendrá la parte de exploración, que sigue siendo romántica, pero en los siguientes 30 años será una realidad. Es parte de la participación que tienen la Universidad y México; quizá ahora son misiones académicas o algunos esfuerzos por separado, en unos años será palpable y este tipo de colaboraciones nos hace tener presencia en donde no la tuvimos en su momento, como en 1969.”
Conforme pase el tiempo, concluyó, la tecnología nos obligará a sacar recursos del espacio, y es donde veremos esto como una necesidad.
(Con información de Gaceta UNAM)