Inconstitucional cierre de vialidades en Tapachula
Los médicos han subido su carga laboral, pero muchos de sus pacientes, son personas de bajos recursos económicos para consulta
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Los jueces Federales de los juzgados de Distrito domiciliados en Tapachula dieron la suspensión provisional a los comerciantes y empresarios afectados por las medidas anticonstitucionales del cierre de vialidades en Tapachula, que en nada previenen la propagación del virus SARS Cov-2, Covid-19, pues el perímetro cercado con las cintas de contención, funcionan como un “cuello de botella” donde se arremolinan transeúntes y automovilistas al por mayor, lo que hace un verdadero foco de infección y contagio, el que no se pueda circular.
Si a eso se le suma que personal de la policía y empleados de los consorcios que mantienen abiertas sus negociaciones dentro del perímetro restringido, no usan cubrebocas, ni mantienen la sana distancia, pero reciben clientes y proveedores continuamente, la situación empeora.
No hay un acta de cabildo donde se haya colegiado la decisión de cerrar calles, simplemente la Sra. Urbina, presidenta sustituta de Tapachula, dio la orden y así se procedió.
Los comerciantes y empresarios tapachultecos, así como la población que los apoya, esperan que la autonomía del Poder Judicial impere, como lo hizo en el caso de Baja California, donde mostró que la justicia puede prevalecer en la nación y proteger verdaderamente a los ciudadanos, sin complicidades corruptas con los otros poderes gubernamentales.
Tapachula sufre, como todos los Municipios del Estado un empobrecimiento grave, desde antes de la pandemia, y ha visto recrudecer los males a través de la crisis generada por la pandemia, sin embargo, es incomprensible el desprecio que se tiene a la población local, por parte de sus propias autoridades municipales, pues con cierre de vialidades, acabaron con uno de los pilares de la economía en la región: el Comercio.
Las grandes empresas como: Modelo plus, Elektra, Oxxos y Coppel, sin ser negocios con actividades de primera necesidad, han mantenido sus puertas abiertas, vendiendo a manos llenas, lo mismo que cobrando implacablemente, pero, eso sí, sin querer pagar rentas de sus locales. Solo falta que se les otorguen más beneficios fiscales.
Al transcurrir de los días, se ve a más gente caminando por las calles, sin dinero y con miradas llenas de angustia.
Los médicos han subido su carga laboral, pero muchos de sus pacientes, son personas de bajos recursos económicos, que no tienen para la consulta y menos para los medicamentos; los consultorios de las farmacias del ahorro se ven llenos.
A muchos enfermos no los quieren recibir en los hospitales, como lo fue el caso del Sr. Carlos Rijan, quien está en estado grave por problemas de insuficiencia renal crónica, y al ser llamados los auxilios de protección civil, el día de ayer, alrededor de las 8 a.m., estos se negaron inicialmente a brindarle dicho auxilio, hasta que ante el reclamo Ciudadano, tuvieron que llevarlo y trasladarlo al hospital General, donde después de igual resistencia para su atención, fue ingresado.
Nuestros males se agudizan, y las medidas que toma el ayuntamiento no son sanitarias, ni de cuidado y protección a la población, por lo que la misma población, ante su necesidad, está buscando el amparo de la justicia ante los jueces federales para que les brinden la protección que necesitan ante los agravios de la Presidencia Municipal.
(Con información de Diario Contra Poder en Chiapas)