Exigen parteras de Chiapas ser reconocidas por Salud
La partería contribuye a la disminución de la muerte materna e infantil y ofrece cuidados dignos y respetuosos a las mujeres y sus familias
Más de 500 parteras organizadas de 34 municipios exigieron ser reconocidas y respetadas por el sistema nacional de salud pública de México.
De acuerdo con el Movimiento de Parteras de Chiapas Nich Ixim, es un buen momento para posicionar el ejercicio libre de la partería, de acuerdo con el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y los ordenamientos generados a partir de los artículos 2 y 4 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
La partería, señaló, contribuye a la disminución de la muerte materna e infantil y ofrece cuidados dignos y respetuosos a las mujeres y sus familias, respetando su derecho a decidir cómo y con quién atenderse. Las parteras –subrayó– atienden el proceso reproductivo de las mujeres respetando su cultura, su cosmovisión y el cuerpo de cada una.
Nich Ixim es un movimiento mestizo, indígena y afrodescendiente conformado por más de 500 mujeres de 34 municipios y comunidades indígenas y no indígenas del estado, y realiza actividades regulares y de coordinación desde 2015 a la fecha.
Uno de sus objetivos principales es el reconocimiento, dignificación y libre ejercicio de la partería. Ante los cambios de estructura que vive el sistema de salud con la instalación del Instituto de Salud para el Bienestar (InsabiI), Nich Ixim precisó que las parteras cumplen un papel clave en el cuidado general de la salud y la vida en las comunidades más marginadas de la entidad.
Y ante la situación actual de discriminación, violencia de género y violencia obstétrica que las mujeres viven en el estado Chiapas, así como la ineficiencia del sector salud, exigieron el derecho a trabajar libremente y sin condicionamientos, y atender a las mujeres en el embarazo, parto o postparto, de acuerdo con su decisión.
También demandaron que se les reconozca su contribución social mediante un estímulo por su trabajo y se les trate dignamente cuando trasladen a una mujer a un hospital.
De igual manera, tener clínicas y centros de salud con personal médico especializado y capacitado para la atención de las mujeres y sus bebés, además de recibir insumos y equipo “para realizar nuestra atención y sobre todo el derecho a la defensoría legal”.
Es urgente, dijeron, atender a las mujeres con plantas y medicina tradicional dentro de los centros de salud. Que las parteras sean quienes regulen el ejercicio de la partería, se capaciten y definan sus respectivas competencias. Y, sobre todo, poder mantener la confidencialidad de sus saberes tradicionales
(Con información de Diario Contra Poder en Chiapas)