Ejidatarios espantan al turismo de Agua Azul
Además de los asaltos y largas filas también lidian con los abusos en los costos por conflictos sociales entre grupos de comuneros
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Descontento y decepción es lo que ha generado en los turistas procedentes de diferentes estados y del extranjero la que prevalece en la zona selva del estado, ya que además de los asaltos, así como largas filas también tienen que lidiar con los abusos en los costos por conflictos sociales entre grupos de comuneros.
En esta temporada vacacional, los paseantes tienen que desembolsar dinero por el simple hecho de transitar por las carreteras de esta zona de la entidad, por lo que el ingreso a un centro ecoturístico les puede costar entre 300 y 500 pesos.
Y es que una añeja disputa por la caseta de cobro de acceso a las Cascadas de Agua Azul entre los ejidatarios pone en tela de juicio y mancha la imagen de esta zona turística por excelencia de calidad.
Empresarios de este ramo dan a conocer que no es un tema nuevo ya que debido al recurso económico que entra a la caseta de cobro, derrama económica que generan las cascadas de Agua Azul con la visita de turistas locales, nacionales y extranjeros, se ha desatado un enfrentamiento entre grupos de comuneros.
Esta disputa ha llegado a tal grado de que en la caseta de acceso a este lugar se han registrado enfrentamientos que han dejado muertos y varios heridos.
Por ello, este mismo miércoles 7 de agosto un segundo grupo de comuneros colocaron una segunda caseta de cobro en la primera caseta cobran 50 pesos, en la segunda cobran, 50 pesos también, además de que en ocasiones se les cobra más y hasta de regreso, algunos vehículos tienen que gastar hasta 500 pesos para ingresar a estos lugares.
Asimismo, instalaron un bloqueo-boteo en el tramo federal Ocosingo-Palenque, donde cobran el paso por vehículos la cantidad de 300 pesos, lo que está afectando directamente a todos los que transitan por este tramo.
En este lamentable panorama piden a las autoridades para atender este tema que mancha la imagen del estado y por ende la economía ya lacerada por la crisis.
(Con información de Diario Contra Poder en Chiapas)