Alcohol y privación del sueño causan accidentes automovilísticos
Villahermosa.- En México, 60 por ciento de los accidentes automovilísticos están relacionados con el alcohol y la somnolencia ocasionada por conducir durante varias horas o el exceso de sueño por desvelo, informó la Secretaría de Salud.
Los accidentes vehiculares son la principal causa de muerte en la población de 18 a 25 años de edad, sobre todo porque son jóvenes que acostumbran desvelarse y no le dan importancia a dormir bien.
En el caso del alcohol –a pesar de ser un depresor del sistema nervioso y, por ende, favorecedor del sueño–, cuando se ingiere en alta cantidad o continua, provoca una alteración en la organización del sueño.
Es importante mencionar que cuando se combina el exceso de sueño por desvelo acumulado y el consumo excesivo de bebidas alcohólicas, se incrementa el riesgo de accidentes vehiculares, principalmente durante los viernes y sábados por la noche. Se afectan los tiempos de reacción, atención sostenida y problemas de ejecución en la conducción del vehículo, explicó la dependencia.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en el año 2014 se registraron 380 mil 573 accidentes vehiculares, y en su mayoría ocurrieron entre las 15:00 y las 24:00 horas, y de 08:00 a 11:00 horas.
Para evitar estas situaciones se recomienda dormir lo suficiente antes de conducir, y si el conductor empieza a sentir sueño cuando maneja por varias horas, debe detenerse y despejarse un poco, incluso realizar activación física para eliminar la somnolencia, pero por ningún motivo se debe conducir cansado, añadió.
Pidió evitar consumir alcohol al menos dos horas antes de ir a dormir, porque el sueño después de su consumo es de mala calidad y se despertará frecuentemente. Asimismo, no deben consumirse bebidas con cafeína, como café, té, refrescos de cola o energizantes, al menos seis horas antes de ir a dormir.
Para alcanzar un sueño reparador evite ir a la cama con hambre o hacer cenas fuertes cuando se acerque la hora de dormir. En caso de despertarse por la noche, no es adecuado comer, ya que se podría acostumbrar a despertar cada vez que sienta la sensación de hambre y eso incrementará su peso, concluyó la Secretaría de Salud. (Con información de boletín)
