Investigador británico, de héroe informático a villano
MalwareTech, hacker que paró al ransomware WannaCry, se declara culpable de crear al troyano bancario Kronos
Un investigador británico de seguridad informática que una vez que fue considerado un «héroe» por ayudar a contener un brote de ransomware pero luego fue acusado de crear malware para atacar el sistema bancario, se declaró el viernes culpable de cargos penales en Estados Unidos.
Marcus Hutchins, cuyo arresto en 2017 sorprendió a la comunidad de seguridad informática, reconoció en un comunicado haberse declarado culpable de cargos criminales relacionados con su actividad entre 2014 y 2015.
«Lamento estas acciones y acepto toda la responsabilidad por mis errores», escribió Hutchins, de 24 años, conocido por su alias «MalwareTech», al tiempo que aclaró que los cargos se relacionaban con su actividad antes de su trabajo de seguridad.
«Habiendo crecido, desde entonces he estado usando las mismas habilidades que utilicé mal hace varios años ahora con fines constructivos. Seguiré dedicando mi tiempo a mantener a las personas a salvo de los ataques de malware», expresó.
Hutchins encontró en 2017 un «kill switch» (interruptor de muerte) para detener la propagación del devastador brote de ransomware WannaCry, lo que provocó que los medios en todas partes lo calificaran de héroe.
Sin embargo, meses después fue arrestado tras asistir a la reunión de piratas informáticos Def Con en Las Vegas.
Una inculpación federal emitida en Wisconsin acusó a Hutchins y otra persona de crear y distribuir el «Troyano bancario» de Kronos, una referencia a un software malicioso diseñado para robar nombres de usuario y contraseñas usadas en sitios de banca en línea.
Según la acusación, Hutchins formaba parte de una organización que tenía por objetivo distribuir ese medio de piratería en los llamados mercados oscuros.
Lo dejaron en libertad bajo fianza a espera del juicio, lo que le permitió continuar trabajando para una empresa de seguridad. Había mantenido su inocencia y ganado el apoyo de muchos otros colegas de profesión.
(Con información de AFP, vía El Economista)
